The Goop Lab: celebridades y pseudociencia

Disfrazado de serie, The Goop Lab no es sino un infomercial plagado de pseudociencia y con Gwyneth Paltrow a la cabeza.

Al inicio de cada capítulo de The Goop Lab, serie presentada por Gwyneth Paltrow  (disponible desde hace varias semanas en Netflix), se advierte al espectador que lo que está por ver es mero entretenimiento y para nada busca darle consejos médicos. Sin embargo, la presencia de sus “expertos” y los múltiples testimonios de “éxito”, dan una apariencia completamente distinta.

He ahí el gran peligro con The Goop Lab.

Terapias milagrosas

Desde hace más de una década, Gwyneth Paltrow ha compaginado su carrera como actriz con su trabajo al frente de Goop, una empresa que nació como un blog de estilo de vida y que se ha convertido en una exitosa marca de productos de belleza y bienestar.

Al igual que su portal de internet, The Goop Lab funciona como un escaparate para una serie de métodos y productos cuestionables que se venden (sin un sustento científico real) como solución a problemas médicos serios.

Por ejemplo, algunos de los empleados de Goop se someten (de manera voluntaria) al uso de drogas psicodélicas como parte de una sesión de psicoterapia. Una vez finalizada la experiencia, una de las participantes señala sentirse liberada, casi como “haber ido a cinco años de terapia en tan sólo cinco horas”.

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Como por arte de magia

Si alguna vez han estado en contacto con alguien que vive con depresión o ansiedad (o cualquier otro padecimiento psicológico), sabrán que tratar enfermedades como éstas no es tan simple y, en muchos casos, requieren de años de trabajo y constancia.

No obstante, con el método ofrecido de manera tan pulcra y atractiva por Gwyneth Paltrow  y su equipo, pareciera que los problemas de las personas pueden resolverse de manera casi mágica, lo cual es por lo menos una irresponsabilidad.

Lo peor de todo, es que ese fue apenas el primero de seis episodios.

Mientras veía The Goop Lab no podía dejar de preguntarme cómo demonios Netflix accedió a apoyar un producto pseudocientífico como este, en especial, cuando en su catálogo tienen un documental que busca explicar el fenómeno del terraplanismo (Tan plana como un encefalograma, 2018).

Y es en este punto cuando debemos hablar del impacto negativo de las celebridades.

La terapia de la mandarina

Hace poco más de un año, Ellen DeGeneres entrevistaba a Anne Hathaway en su show. De pronto ella comenzó a hablar sobre una técnica de sanación espiritual que había aprendido, la cual involucraba respirar a través de una mandarina. Aún con lo extraño que sonaba, los asistentes del show comenzaron a imitar a ambas famosas. Cuál sería su sorpresa cuando Hathaway les reveló que todo era mentira y que la lección que debían aprender era no hacer algo sólo porque una celebridad se los pidiera.

La nuestra es una sociedad consumista, eso es un hecho. Y los famosos juegan un papel fundamental pues a través de ellos, infinidad de productos y servicios buscan llegar a sus clientes. No por nada actores, cantantes, deportistas, son frecuentes protagonistas de campañas de publicidad.

Ante los ojos del público, al usar su nombre, estos famosos (aún sin estar conscientes de ello) dan credibilidad a esos productos.

Infomercial vestido de serie

El problema viene cuando también se convierten en voceros de ideas tan insensatas como el movimiento antivacunas (Jim Carrey, Alicia Silverstone, Charlie Sheen y Robert de Niro, por ejemplo) o se dedican a promover productos milagro que únicamente tendrán un beneficio económico para sus bolsillos.

En el caso de Gwyneth Paltrow, ese estatus de celebridad le ha dado la posibilidad de encabezar una compañía que, de acuerdo a la revista Fortune, en 2018 valía unos $250 millones de dólares.

Por todo lo anterior, más que una serie, The Goop Lab es un infomercial al que hay que entrar con mucha precaución. O mejor aún, del que hay que huir a toda velocidad.


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Soy Sarai Rosas Bautista, licenciada en Comunicación y Periodismo por la UNAM. Amo el cine, así que paso la mayor parte del tiempo aprendiendo sobre él. Disfruto viajar y ser una nerd.