Buscando Justicia: una historia de racismo

Michael B. Jordan abandona el traje negro y los guantes de box para enfrentarse a una pelea aún más difícil: el sistema judicial racista que impera en E.U.

Buscando justicia

Buscando Justicia es la nueva película liderada por el director Destin Daniel Cretton y que, basado en una historia real, cuenta la historia de Bryan Stevenson (Michael B. Jordan) abogado decide dedicarse a salvar inocentes condenados a la pena de muerte. Uno de sus primeros trabajos en su incipiente carrera es el de Walter McMillian (Jamie Foxx), hombre condenado a morir en la silla eléctrica por el asesinato de una joven (a la sazón) blanca. La sentencia de McMillan está armada con el testimonio de un solo testigo que dice haber visto a Walter matar a la víctima. Esto, por supuesto, huele más a racismo que a justicia clara y expedita.

El sistema claramente está amañado. Sentencias como la de Walter abundan en la justicia norteamericana, hombres cuya culpabilidad no está del todo probada, pero que por su color de piel tienen todas las de perder.

Suena como una historia simple y que incluso ya hemos visto antes, y en cierto punto sí lo es. Como muchas de las películas que hablan del sufrimiento de minorías en Estados Unidos, Buscando Justicia utiliza la carta del melodrama y el extremo sufrimiento de sus personajes para crear empatía por parte del espectador. No es algo malo pero tampoco es algo nuevo. 

Te puede interesar:  Maradona en Sinaloa: una falta de Netflix a los documentales deportivos

Haciendo visible la injusticia

El gran acierto de la película (y lo que la vuelve visible e interesante) son las historias secundarias. Conocemos, como trasfondo de la historia principal, más y más casos de afroamericanos cuyo color de piel es determinante al momento de recibir sentencia. “Nosotros nacemos siendo culpables”, menciona una de las víctimas de este sistema de justicia plenamente racista.

También aporta mucho la calidad de su cast. Michael B Jordan demuestra que tiene el rango suficiente como para hacer papeles «serios» donde la acción física no se involucre, aunque, no tiene nada que hacer frente a un Jamie Foxx que se roba la pantalla con su excelente actuación que ya lo caracteriza. Brie Larson también aparece en el filme, pero su papel es demasiado secundario como para que brille, al grado que pasa casi desapercibida. 

En general, Buscando Justicia es una película entretenida que, aunque es una historia que ya hemos visto antes, logra despegarse del resto gracias a sus historias secundarias, bastante interesantes. Con buenas actuaciones, Buscando Justicia es un drama contenido que no toma demasiados riesgos pero tampoco defrauda. La película se sitúa en los 80’s pero tristemente bien podría tratarse del 2020.