Morbius: nos urge que Jared Leto regrese a la música

Si el cine de superhéroes es un parque de diversiones, Morbius es el parque a dos cuadras de tu casa: ese que le falta mantenimiento y una capa de pintura.

Morbius Jared Leto

Desgraciadamente para Sony, no todo es Spider-Man. Al monumental éxito de No Way Home (2021) y al éxito inesperado de Venom: Let There Be Carnage (2021), ahora se le suma Morbius (Espinosa, 2022) cinta con la que Jared Leto se une al MCU luego del fracaso de su Joker en DC. ¿Será que en Marvel lo haga mucho mejor? Spoiler: no.

Morbius, de Daniel Espinosa (Safe House y Life), cuenta la historia origen de Michael Morbius (Jared Leto), un doctor que tras sufrir una enfermedad que afecta su sangre y al intentar buscar su cura, se convierte en una especie de vampiro.

Si (Scorsese dixit) el cine de superhéroes es un parque de diversiones, Morbius es el parque que queda a cuadras de tu casa, ese al que le urge una pintadita y los juegos ya están viejitos. Morbius  es una película de algoritmo, pero uno que necesita actulaizarse. Es el tipo de película que se siente relleno, una distracción a en lo que ocurre algo más interesante o para introducir narrativas de otras películas.

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Feria de clichés

Morbius tiene todas las muletillas del cine de superhéroes, donde los diálogos de exposición y los personajes innecesarios no pueden faltar. Aunque la idea de hablar de vampiros es interesante, Morbius peca de ordinaria, al punto de volverse un Crepúsculo (Hardwicke, 2008) pero con superhéroes, donde literalmente hay escenas sacadas de las películas donde Robert Pattinson era protagonista.

El acercamiento de Jared Leto a Morbius también deja mucho que desear: el personaje se siente blando, sin personalidad ni fuerza. Si este era su proyecto de redención frente al desfortunio del Joker, definitivamente se equivocó. Dicho esto, no creo que sea cien por ciento su culpa: el guión es insufrible y predecible, con personajes construidos como caricaturas, en vez de como seres humanos.

Para rematar, los aspectos técnicos tampoco deslumbran. De hecho, el VFX es bastante malo, y la edición mucho peor. A la producción se le olvidó por completo la continuidad y el ritmo, por lo que la película termina sintiéndose desentonada, con momentos muy apresurados, y otros bastante lentos.

Morbius no aporta mucho al mundo de superhéroes. Sus oportunidades técnicas y narrativas la convierten en una película bastante desganada, volviendóla solo un puente para llegar a un próximo filme, y aunque quizás haga mucho dinero en box office, no hace gran cosa por el mundo de superhéroes.

P.D.: ¿Quién le puede decir a Leto: amiga, date cuenta? El cine ya no es lo tuyo. Mejor saca otro disco.